Nos referimos a la alimentación en la primera infancia a la etapa comprendida de 0 a 3 años. Esta es, sin duda, la que más me gusta para hacer educación nutricional con las familias. Es un periodo crucial para el aprendizaje de hábitos alimentarios saludables, ya que la mayoría de lo aprendido en esta etapa quedará para siempre.
Empezamos hablando de la lactancia. La mejor opción es la lactancia materna, pero si no es posible o la madre decide no dar el pecho, otra opción sería la leche de fórmula. En el mercado la podemos encontrar con el nombre leche de inicio o de tipo 1 y está indicada para bebés de 0 a 6 meses. Estas leches tienen que cumplir una legislación muy estricta y tanto la más cara como la más barata, la compremos en farmacias o supermercados, todas, van a ser aptas para alimentar a un bebé. Por ley, van a llevar ya los nutrientes básicos necesarios en su composición.
Hay laboratorios farmacéuticos que van más allá, y refuerzan su leche con “ingredientes” para favorecer ciertos procesos, como mejorar la digestión del bebé, disminuir el cólico del lactante, etc. Al final cada familia se decantará por una marca o por otra dependiendo de múltiples factores, como por el sabor que más le guste al bebé, la que mejor le siente, por precio, recomendación sanitaria, publicidad…
Al hilo de las leches de fórmula, también hay de continuación o tipo 2, indicadas desde los 6 hasta los 12 meses y de crecimiento o tipo 3 para niños a partir del año. Ambas no son necesarias aunque nos hagan creer lo contrario. La lactancia debe ser exclusiva hasta los 6 meses, a partir de ahí, junto a la alimentación complementaria, el bebé obtendrá los nutrientes necesarios sin tener que recurrir a las leches tipos 2 y 3. Se puede continuar con la leche de inicio más tiempo y a partir de los 12 meses, si se quiere, se puede introducir la leche de vaca.
En el caso de la lactancia materna, la Organización Mundial de la Salud (OMS), recomienda alargarla mínimo hasta los 2 años, siempre que la mamá y el niño quieran. Ahora bien, para muchísimas madres se complica ya que no es posible una lactancia exclusiva durante 6 meses si en el mejor de los casos la baja de maternidad en nuestro país es de 16 semanas. Con la vuelta al trabajo hay que recurrir al sacaleches y refrigerar o congelar la leche si se decide seguir con la lactancia materna.
Para terminar, con esta información introductoria, recordar la existencia de grupos de lactancia a los que recurrir en caso de necesitarlos.
En NUTRICOR Grupo el servicio de nutrición más personalizado para cada persona. Además te enseñamos a comer y ciertos tips que pueden venirnos bien en nuestro día a día.
¡Pide tu cita ya! o pregúntanos sin compromiso.