¿POR QUÉ TENGO QUE VIGILAR MI OMBLIGO DURANTE EL EMBARAZO?
Durante el embarazo, nuestro abdomen va a crecer paulatinamente y por ello debemos de vigilar este crecimiento porque puede provocar que en el postparto no vuelva a ser el que era antes.
Por ello es importante prevenir e intentar que durante el embarazo tu abdomen crezca sano, y una de las herramientas que nos dicen cómo está ese abdomen es tu ombligo.
¿Qué pasa con el ombligo?
Piensa que bajo de tu piel existen diferentes músculos, exactamente 4 principales:
- RECTO DEL ABDOMEN
- OBLICUO INTERNO
- OBLUCUO EXTERNO
- TRANSVERSO DEL ABDOMEN
Estos 4 músculos deben de crecer de forma equitativa, sino uno de ellos se va a estirar más que otro, y esto puede provocar que aparezca la famosa DIÁSTASIS ABDOMINAL durante el embarazado. El músculo que sufre esta distensión son los rectos del abdomen.
Pues bien, tu ombligo te da pistas de cuánto se están separando los músculos y de qué forma. Así que si notas que:
- Te pica la piel.
- Tienes la barriga en forma de pico.
- El ombligo ha salido hacia fuera.
- Notas mucha tensión en tu abdomen.
- Han salido estrías.
Debes de valorar tu abdomen y prevenir, porque estos signos sin señales de que puedes tener diástasis abdominal en tu postparto. Y esto conlleva a que la recuperación se prolongará, por lo que tenemos que prevenir que aparezca.
¿QUÉ PUEDES HACER?
- Valorar tu abdomen con un profesional.
- No hagas abdominales.
- Fortalece la faja profunda (transverso del abdomen).
- Relaja la musculatura con masajes y estiramientos.